jueves, 14 de mayo de 2015



LA POESÍA ES UN ARMA CARGADA DE FUTURO
Poesía social (Gabriel Celaya.)

Cuando ya nada se espera personalmente exaltante, 
mas se palpita y se sigue más acá de la conciencia, 
fieramente existiendo, ciegamente afirmado, 
como un pulso que golpea las tinieblas,

cuando se miran de frente 
los vertiginosos ojos claros de la muerte, 
se dicen las verdades: 
las bárbaras, terribles, amorosas crueldades.

Se dicen los poemas 
que ensanchan los pulmones de cuantos, asfixiados, 
piden ser, piden ritmo, 
piden ley para aquello que sienten excesivo.

Con la velocidad del instinto, 
con el rayo del prodigio, 
como mágica evidencia, lo real se nos convierte 
en lo idéntico a sí mismo.

Poesía para el pobre, poesía necesaria 
como el pan de cada día, 
como el aire que exigimos trece veces por minuto, 
para ser y en tanto somos dar un sí que glorifica.

Porque vivimos a golpes, porque apenas si nos dejan 
decir que somos quien somos, 
nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno. 
Estamos tocando el fondo.

Maldigo la poesía concebida como un lujo 
cultural por los neutrales 
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden. 
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.

Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren 
y canto respirando. 
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas 
personales, me ensancho.

Quisiera daros vida, provocar nuevos actos, 
y calculo por eso con técnica qué puedo. 
Me siento un ingeniero del verso y un obrero 
que trabaja con otros a España en sus aceros.

Tal es mi poesía: poesía-herramienta 
a la vez que latido de lo unánime y ciego. 
Tal es, arma cargada de futuro expansivo 
con que te apunto al pecho.

No es una poesía gota a gota pensada. 
No es un bello producto. No es un fruto perfecto. 
Es algo como el aire que todos respiramos 
y es el canto que espacia cuanto dentro llevamos.

Son palabras que todos repetimos sintiendo 
como nuestras, y vuelan. Son más que lo mentado. 
Son lo más necesario: lo que no tiene nombre. 
Son gritos en el cielo, y en la tierra son actos.
Vientos del pueblo de Miguel Hernández.

Vientos del pueblo me llevan,
vientos del pueblo me arrastran,
me esparcen el corazón
y me aventan la garganta.

Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.

No soy de un pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?

Asturianos de braveza,
vascos de piedra blindada,
valencianos de alegría
y castellanos de alma,
labrados como la tierra
y airosos como las alas;
andaluces de relámpagos,
nacidos entre guitarras
y forjados en los yunques
torrenciales de las lágrimas;
extremeños de centeno,
gallegos de lluvia y calma,
catalanes de firmeza,


aragoneses de casta,
murcianos de dinamita
frutalmente propagada,
leoneses, navarros, dueños
del hambre, el sudor y el hacha,
reyes de la minería,
señores de la labranza,
hombres que entre las raíces,
como raíces gallardas,
vais de la vida a la muerte,
vais de la nada a la nada:
yugos os quieren poner
gentes de la hierba mala,
yugos que habéis de dejar
rotos sobre sus espaldas.
Crepúsculo de los bueyes
está despuntando el alba.

Los bueyes mueren vestidos
de humildad y olor de cuadra:
las águilas, los leones
y los toros de arrogancia,
y detrás de ellos, el cielo
ni se enturbia ni se acaba.
La agonía de los bueyes
tiene pequeña la cara,
la del animal varón
toda la creación agranda.

Si me muero, que me muera
con la cabeza muy alta.
Muerto y veinte veces muerto,
la boca contra la grama,
tendré apretados los dientes
y decidida la barba.

Cantando espero a la muerte,

que hay ruiseñores que cantan
encima de los fusiles
y en medio de las batallas.




miércoles, 8 de abril de 2015

Tuerto, maldito y enamorado.

En 3º de ESO leemos Tuerto, maldito y enamorado de Rosa Huertas. Os dejo un vídeo y un enlace a la página web de la autora (pulsad en el nombre). Espero que os guste este libro.







domingo, 25 de enero de 2015

El léxico castellano.

Palabras patrimoniales, cultismos y semicultismos




El Imperio Romano exportó su cultura y sus palabras a lo largo y ancho de las zonas conquistadas. Y el hecho de que los romanos llegaran a la península en el siglo III antes de Cristo y que su  enorme Imperio no se desmembrara hasta el siglo V de la era cristiana, supuso nada más y nada menos que casi ocho siglos de dominio (decenio arriba, decenio abajo). Por eso en castellano tenemos infinidad de palabras derivadas del latín. 
Pero no todas son iguales... Hay que distinguir los siguientes tipos de palabras procedentes del latín:

- Latinismos: son palabras o expresiones que han pasado al castellano sin que haya mediado ningún cambio en su escritura (a priori, a posteriori, ipso facto, per capita, etc.).

Ejercicios con latinismos.


- Palabras patrimoniales: son palabras que, desde que vinieron los romanos y las trajeron, han pertenecido siempre a nuestro caudal léxico. Las palabras patrimoniales proceden del latín hablado, de modo que su evolución es fruto de los cambios producidos en el hablar del pueblo que las utilizaba, que las fue cambiando paulatinamente, siguiendo unas leyes fonéticas. Así pues, este tipo de palabras presentan una evolución completa, o lo que es lo mismo, unos cambios sustanciales con respecto a su palabra original en latín:filium> hijo.



- Cultismos: son palabras procedentes del latín culto (generalmente escrito)  incorporadas al léxico castellano en épocas diferentes, a través de las ciencias, las artes y la literatura, con el fin de designar nuevos conceptos. Estas palabras ya no están sujetas a las leyes fonéticas que hemos mencionado antes, de ahí que no hayan sufrido demasiados cambios, sino que solamente han sido adaptadas para no parecer extrañas (recuperare > recuperar, citare > citar).
Pero si una cosa ya deberíais saber a estas alturas es que nuestra lengua es bastante compleja (¿o caprichosa?) de ahí que sea frecuente que de un mismo término latino deriven dos castellanos, uno patrimonial y otro culto: son los denominados dobletes.  
















Aquí tenéis otros ejemplos:


Latín                 Cultismo               Patrimonial 

animam              ánima                    alma

calidum              cálido                    caldo

capitalem           capital                   caudal

cathedram         cátedra                  cadera

causam              causa                     cosa

clamare             clamar                    llamar 

clavem               clave                      llave

claviculam         clavícula                clavija

computare         computar               contar

cubiculum          cubículo                 cobijo
delicatum           delicado                delgado
directum            directo                   derecho
fabulam             fábula                     habla
filium                 filial                         hijo
limpidum           límpido                    limpio
litigare              litigar                       lidiar
operam             ópera                      obra
ovum                óvulo                       huevo
patrem              paternal                   padre
planum              plano                      llano
plenum              pleno                      lleno
proximum          próximo                 prójimo
recitare              recitar                    rezar
rupturam            ruptura                  rotura
solitarium           solitario                 soltero
strictum             estricto                   estrecho

- Semicultismos: son palabras que no han evolucionado completamente, y aunque presentan un aspecto más evolucionado que el cultismo, están menos evolucionadas que las palabras patrimoniales. Por ejemplo, saeculum > 'siglo' presenta sonorización de la c (una de esas reglas que, como hemos dicho, siguen las patrimoniales) pero su no evolucionó más, puesto que entonces, diríamos 'sejo'.

Por último, un par de ejercicios para que practiquéis: uno para que digáis si la palabra propuesta es un cultismo o una patrimonial, y otro para relacionéis el término latino con sus correspondientes dobletes.